3 ene 2017

EL CREDO - EXPLICADO PARA NIÑOS


                                    

                    CATOLIKIDS 































INDULGENCIAS POR LOS 100 AÑOS DE LA VIRGEN DE FATIMA


(ACI).- Por los 100 años de las apariciones de la Virgen de Fátima en Portugal, el Papa Francisco ha decidido conceder la indulgencia plenaria durante todo el Año Jubilar que comenzó el 27 de noviembre y terminará  el 26 de noviembre de 2017.
El Santuario de Fátima indicó que para obtener las indulgencias plenarias los fieles deben  cumplir primero con condiciones habituales: confesarse, comulgar y rezar por las intenciones del Santo Padre.
En declaraciones a ACI Prensa, el secretario de la rectoría del Santuario de Fátima en Portugal, André Pereira, explicó que las indulgencias plenarias podrán obtenerse durante todo el Año Jubilar y para ello existen tres maneras, detalladas en un comunicado publicado en el sitio web del santuario.
1.- Peregrinar Santuario : La primera forma es que “los fieles vengan en peregrinación al Santuario de Fátima en Portugal y que allí participen en una celebración u oración dedicada a la Virgen”.
Además de ello los fieles deben rezar el Padrenuestro, recitar el Credo e invocar a la Madre de Dios.
2.- Ante cualquier imagen de la Virgen de Fátima en todo el mundo
La segunda forma se aplica para “los fieles piadosos que visitan con devoción una imagen de Nuestra Señora de Fátima expuesta solemnemente a la veneración pública en cualquier templo, oratorio o local adecuado en los días de los aniversarios de las apariciones, el 13 de cada mes desde mayo hasta octubre (de 2017), y participen allí devotamente en alguna celebración u oración en honor de la Virgen María”.
Al respecto de la segunda forma, el secretario de la rectoría del Santuario de Fátima indicó a ACI Prensa que la visita a la imagen la Virgen “no tiene que ser necesariamente solo en Fátima o exclusivamente en Portugal” sino que puede ser en cualquier parte del mundo.
También se debe rezar un Padrenuestro, el Credo e invocar a la Virgen de Fátima.
3.- Ancianos y enfermos:La tercera forma de obtener una indulgencia se aplica a las personas que por la edad, enfermedad u otra causa grave estén impedidos de movilizarse.
Pueden rezar ante una imagen de la Virgen de Fátima y deben unirse espiritualmente en las celebraciones jubilares en los días de las apariciones, los días 13 de cada mes, entre mayo y octubre de 2017.
Además tienen que “ofrecer con confianza a Dios misericordioso, a través de María, sus oraciones y dolores o los sacrificios de su propia vida”.

31 dic 2016

26 dic 2016

Ciclo A Año impar 2017.


Durante tres ciclos (A,B y C) recorremos en el evangelio la vida del Señor. Este año especialmente corresponde al Ciclo Litúrgico A: leeremos  especialmente a Mateo.

Este año que comienza es Ciclo A, año impar.



-En los tres ciclos se lee de primera lectura Hechos de los Apóstoles, de modo que en tres años, yendo sólo a las misas de domingo del tiempo Pascual, hemos escuchado al menos una vez prácticamente todo Hechos de los Apóstoles.
-En el ciclo A se lee de segunda lectura la Primera Carta de Pedro.
-En el ciclo B la Primera de Juan
-En el ciclo C partes del Apocalipsis
-En cuanto a los Evangelios, en los tres ciclos se lee Juan (pero no las mismas lecturas cada año)
-Durante el año, se sigue el orden de los evangelios sinópticos: en el ciclo A se lee Mateo, en el B Marcos y en el C Lucas, y vuelta a empezar; Juan se va leyendo intercalado en los tres.

De este modo, quien participe de la misa dominical, en tres años ha escuchado leer (caso de que el lector vocalice y se le entienda algo, cosa que de por sí requeriría una especial y milagrosa intervención de Dios en las parroquias del Orbe) casi todo el Nuevo Testamento y partes sustanciales del Antiguo.
En el Tiempo Ordinario , durante la primera lectura, recorremos la historia de nuestros mayores en el Antiguo Testamento (relacionada esta lectura con el evangelio, para que se vea la unidad de Testamentos).
Con la segunda lectura y a lo largo de tres años , se recorren las cartas de San Pablo y Santiago y nos hacen comprender como los primeros cristianos viven la novedad de Jesús.
Este alimento espiritual que nos ofrece la Iglesia a través de la liturgia, solicita una respuesta por nuestra parte con una actitud orante durante la Misa para poder asimilar y acogerla en nuestra vida.


24 dic 2016

La Navidad en Medjugorje



La Virgen María narra la Navidad en Medjugorje
La presencia diaria de la Virgen María en Medjugorje, por casi 30 años, es la intervención extraordinaria de Dios, más grande en la historia después de Pentecostés. Y reconocida la sobrenaturalidad del fenómeno, de parte del Magisterio: será el acontecimiento eclesial que, después del evangelio, realce más la figura de la Virgen. Se recuerda que en Medjugorje la Virgen le narró a los videntes (durante dieciocho meses) toda su vida: desde su nacimiento hasta su gloriosa Asunción a los cielos. Y a la vidente Vicka, de manera especial, le dictó todos los detalles. De tal manera, que la vidente llegó a escribir tres cuadernos. Vicka, a partir de Pentecostés de 1983, espera el momento que la Virgen indique para publicar esta narración. Otro dato interesante, mientras corría el año 1984, es que los videntes afirmaron que la Madre de Dios les reveló que el día de la celebración del Bimilenario de su nacimiento era el 5 de agosto. También aquel mismo año, el 25 de diciembre, la vidente Jelena Vasilj tuvo una visión sobre la Navidad que presentamos a continuación. El episodio está tomado del libro “Oren Juntos con el Corazón Alegre” del Padre Slavko Barbaric, antiguo guía espiritual de los videntes y del Santuario de Medjugorje.
Testimonio de Jelena Vasilj
—“La Virgen me prometió el 22 de diciembre (de 1984), que el 25 me iba a mostrar cómo vivió la Navidad; y tuve la siguiente visión:
—Al inicio vi un ángel que luego desapareció. De inmediato todo se volvió oscuridad y de la oscuridad, poco a poco, apareció un cielo estrellado. En el horizonte vi a alguien que se acercaba. Era san José con un bastón en la mano. Caminaba sobre una calle empedrada y en el fondo, hacia donde se dirigía, vi varias casitas iluminadas. Al lado suyo vi un mulo, y sobre él, vi a la Virgen muy triste,mientras le decía José:“Estoy muy cansada. Mucho desearía que alguien nos hospedara esta noche”. Y José contesto: “Allí hay casas. Pediremos allí”. Al acercarse a la primera casa, José llamó a la puerta. Alguien le abrió, pero a penas vio a José y María, cerró inmediatamente la puerta. Esta escena se repitió varias veces. Y en algún caso, para incitarle a María y a José que no llamaran a las puertas mientras se dirigían hacia sus casas, llegaron hasta a apagar las luces interiores. Ambos estaban muy tristes, y José particularmente estaba muy adolorido, confundido y turbado por todos estos rechazos. María en medio de su tristeza lo animó diciéndole: “¡José: conserva la paz!, ¡el día de la alegría ha llegado! Sin embargo, ahora deseo orar contigo porque hay mucha gente que no le permite a Jesús nacer!”
“Después de haber orado, María dijo: “¡José, mira: allá abajo hay un establo! En verdad allí no duerme ninguno. Seguramente está abandonado”. Y de esta manera se dirigieron hacia allá. Adentro hay un mulo y llevan también el suyo delante del pesebre. Entonces, José recoge un poco de leña para encender el fuego. Luego coloca un poco de paja; pero el fuego inmediatamente se apaga, porque tanto la leña como la paja estaban sumamente húmedas. Mientras tanto, María, busca como calentarse cerca de los mulos.
Sucesivamente, se me presentó una segunda escena. El establo, que hasta ahora estaba poco iluminado, de pronto se iluminó como si fuera de día. Y de momento, cerca de María, vi al Niño Jesús recién nacido mover las manitas y los piececitos. Tiene un rostro sumamente dulce; parece que ya sonríe. El cielo, por otra parte, se llena de muchas estrellas luminosas. Arriba del establo vi dos ángeles que llevaban en la mano algo parecido a una bandera grande sobre la cual estaba escrito: “¡Te glorificamos, oh Señor!” Sobre estos dos ángeles, había un enorme ejército celestial que cantaba y glorificaba a Dios. Luego, algo distante del establo, vi un grupo de pastores que cuidaba su rebaño. Están cansados y algunos ya dormían. Y he aquí que un ángel se les acerca y les dice: “Pastores escuchen la buena nueva: ¡Hoy Dios ha nacido en medio de ustedes! Lo encontrarán recostado en el pesebre de aquel establo. Sepan que lo que les digo es cierto”. De inmediato los pastores se dirigieron hacia el establo y, luego de haber encontrado a Jesús, se arrodillaron y le ofrecieron sencillos dones. María les agradece con dulzura y agrega: “Les agradezco por todo, sin embargo, quisiera ahora orar con ustedes, porque muchos no quisieron acoger a Jesús que estaba por nacer”.
Después de esto, instantáneamente desapareció esta segunda escena y apareció la tercera. Vi en Jerusalén los Magos que preguntaban por Jesús, pero nadie sabía darles información al respecto; hasta que vieron levantarse de nuevo la estrella cometa que los guiaba hasta el establo de Belén. Extasiados y conmovidos, observan al Niño Jesús, se inclinan rostro en tierra para adorarlo profundamente y luego le ofrecen dones preciosos. María les agradece y les dijo luego: “Ahora deseo orar con ustedes porque muchos hombres no quisieron adorar a Jesús”.
Hasta aquí la narración de la Navidad según Jelena.
También en el 15 de diciembre de 1984, la Virgen sugirió a los videntes unos temas de preparación a la Navidad.
1. “Habrán sus corazones, porque Jesús quiere habitar en ellos después de la Navidad.”
2. “Acojan la Navidad con alegría.”
3. “Purifíquense para la Navidad.”
4. “De ahora en adelante, permitan que Jesús ocupe el primer lugar en sus corazones.”
5. “Permitan que sólo Jesús los colme de alegría.”
6. “Permitan que el amor esté presente en cada una de sus palabras.”
7. “Nace el Hombre-Dios que desea el mundo unido.”
8. “Vivan en Jesús.”
9. “No se aparten de la Navidad.”