4 ago 2025
NOVENA EL CORAZON DEL CATEQUISTA 1 AL 5 DIA ...
3 ago 2025
Agosto
María, nuestra mamá del cielo, tiene un corazón lleno de amor por nosotros. Ella nos toma de la mano y nos lleva hacía Jesús. María nos acompaña cuando rezamos, nos ayuda a ser mejores: más obedientes, amables y generosos. Así, podemos regalarle a Jesús un corazón lleno de amor.
Es el 21 de agosto. Muchas felicidades por ser una parte tan importante en la Iglesia. El Papa León XIV, nos invita con estas palabras:
"Lleguen a dondequiera que haya un corazón que espera, un corazón que busca, un corazón que necesita." Sigamos este llamado, siempre con alegría y entregando todo por Jesús. (Basílica de San Pedro Martes, 29 de julio de 2025)
28 abr 2025
EL REINO SE PARECE ...
Sobre el Reino que escribió Benjamín González Buelta, sj en su libro "Signos y parábolas para contemplar la historia".
"El Reino de Dios se parece a una india tejedora de tapices. Hasta sus manos hábiles van llegando todos los hilos diferentes en color y en cantidad. A todos los acoge sin desechar ninguno. En el diálogo de los hilos con los dedos de la tejedora, cada hilo va encontrando su lugar preciso para que el dibujo se complete y sea bello, con la presión exacta para que el tejido sea consistente. Los dibujos van apareciendo nuevos, uno tras otro. Al principio parecen un error en el fondo blanco del tapiz, un hilo fuera de sitio, pero después se perfila un cóndor de alas desplegadas, una casa, un pastor. Sólo en el corazón creador de la india ya vive el secreto del dibujo final, que ahora se va revelando poco a poco, surgiendo de la habilidad de sus manos."
"El Reinado de Dios se parece a un enjambre de abejas. Cuando llega hasta su colmena el aroma lejano del eucalipto, excitadas por la noticia, emprenden juntas un largo viaje siguiendo el hilo de perfume que las orienta sin perderse y las alienta en el esfuerzo de su búsqueda. Al final del vuelo hay una fiesta entre los colores vivos, el polen y el néctar de las flores. Los que perciben el aroma del Reino que atraviesa el momento presente, llenos de alegría en la comunidad, se dejan conducir hasta el final festivo de la historia".
"El que no discierne el Reino de Dios es como un hombre descuidado que colgó en la pared de su rancho viejo un cuadro de madera. Pasado algún tiempo, se puso a pensar qué haría con el cuadro, y decidió regalarlo a su mejor amigo. Pero cuando descolgó el cuadro, se dio cuenta de que la polilla del rancho había entrado en él y lo había invadido completamente. Sólo dejó intacta la superficie exterior, fina como un papel. Ya sólo servía para tirarlo a la basura. En el silencio y la oscuridad, la polilla decidió el futuro del cuadro.
El perdón del Reino de Dios se parece a un naranjo exuberante, pero que produce frutos agrios. Cuando se le poda y se le injerta una rama de un naranjo de buena calidad, toda su enorme vitalidad se orienta a producir una gran cosecha de naranjas excelentes".
23 jun 2024
Relato:La diferencia entre el cielo y el infierno.
En aquellos viejos tiempos, contaba una antigua leyenda china, que un discípulo preguntó a su maestro: Maestro, ¿cuál es la diferencia entre el cielo y el infierno? Y el maestro respondió: - Realmente es pequeña, y sin embargo muy grande y con consecuencias importantes. Hay un gran monte de arroz cocido y preparado como alimento. Alrededor hay muchos hombres hambrientos casi a punto de morir. No podían aproximarse al monte de arroz, pero tenían en sus manos largos palillos de dos y tres metros de longitud. Con los largos palillos llegaban a coger el arroz, pero no conseguían llevarlo a la boca porque los palillos eran muy largos. De este modo, hambrientos y moribundos, estaban juntos pero solitarios, permanecían padeciendo un hambre eterna delante de una abundancia inagotable. Y eso era el Infierno. Había otro gran monte de arroz cocido y preparado como alimento. Alrededor de él había muchos hombres, hambrientos pero llenos de vitalidad. No podían aproximarse al monte de arroz también tenían en sus manos largos palillos de dos y tres metros de longitud. Llegaban a coger el arroz, pero no conseguían llevarlo a la propia boca porque los palillos que tenían en sus manos eran muy largos. Sin embargo, con sus largos palillos, en vez de llevarlos a la propia boca, se servían unos a otros el arroz. Y así acallaban su hambre insaciable en una gran comunión fraterna, juntos y solidarios, gozando a manos llenas de los hombres y de las cosas, en casa. Y eso era el cielo.
Anonimo