HOY TENEMOS UN INVITADO MÁS EN NUESTRA MESA... Jesús viene a cenar a casa.
QUEDATE EN CASA...EN FAMILIA Y CON JESÚS.
Les acercamos una ORACIÓN PARA LA MAÑANA y otra para hacer ANTES DE CENAR. Ojalá puedan hacerlas y compartirlas! Todo es para poner al servicio, como nos lo enseña Jesús en este día. SERVIR AMANDO Y AMAR SIRVIENDO. NADA NOS HACE MÁS FELICES QUE COMPARTIR.
El miércoles enviaremos la oración para el Viernes Santo...❤️
En este día, pondremos la mirada en María, pero no en la Virgen,sino en una amiga de Jesús, hermana de Marta y Lázaro,que vivía en una ciudad llamada Betania.
Recuerden que si leemos la Palabra de Dios, cuando finalicemos, a diferencia de los
cuentos en donde decimos colorín, colorado, este cuento se ha terminado, diremos:
“Es Palabra del Señor”. A lo que respondemos, “Gloria a Ti, Señor Jesús”.
¿Los adultos se animan a decir “Es Palabra del Señor”?
¿Y los chicos a responder “Gloria a Ti, Señor Jesús”?
María de Betania lava y unge los pies de Jesús con un perfume de nardo que era carísimo. Imagínense ustedes gastando todo un perfume.
A María no le importa porque quiere demostrarle a Jesús cuánto lo quiere y valora su amistad.
En nuestro altarcito, hoy vamos a poner un pompón de algodón o una servilleta, a la que le colocaremos un poco de algún perfume que tengamos en casa. Eso nos ayudará a pensar en cuáles son los perfumes que más nos gusta sentir. Quizás sea el perfume que se desprende de los jazmines o de un limonero, el de las colonias de bebé, el del pasto recién cortado, el del pan tostado o el de cuando algo se
hornea.
Reunidos en el altarcito, podemos conversarlo en familia:
¿A qué nos gustaría que huela nuestra casa?
Ahora, vamos a pensar en qué cosas haríamos por Jesús.
Recuerden lo costoso del perfume. Debemos pensar en las cosas que más nos cuesta dar y que no son materiales sino todo lo contrario: muestras, gestos de verdadero amor.
Algunos ejemplos podrían ser:
Hacerle caso a nuestros papás.
Compartir los juguetes con nuestros hermanos, incluye también la compu y la play.
No pelear.
Contestar bien.
Ser pacientes y no querer todo ya.
Colaborar en las tareas de la casa.
Dejar de lado los caprichos y berrinches.
También vale el ejercicio para los adultos.
Luego haremos la siguiente oración:
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén.
También podemos rezar cantando. Lo podés hacer entrando en este links.
“Amigos para cantar: Plegaria para la paz”, Edelvives Argentina
Séptimo video del ciclo "7 pasos para la sanación emocional".
Padre Gustavo E. Jamut, omv.
Comunidad Evangelizadora Mensajeros de la Paz.
http://www.comunidadmensajerosdelapaz...